La Republica 14Dic2010
Vargas Llosa: Si hija de dictador es elegida sería una catástrofe
PRONUNCIAMIENTO. Afirma que la mayoría de candidatos garantizan la continuidad democrática. Premio Nobel llama a los políticos a evitar que el Perú retroceda en su desarrollo. Dijo que Ollanta Humala ha moderado su discurso con respecto al 2006.
Marco Sánchez.
Apenas pisó suelo peruano, el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa dejó clara su posición en defensa del sistema democrático y fue enfático en señalar que impediría por los medios legales que la hija del sentenciado ex presidente Alberto Fujimori llegue al gobierno el 2011.
Cansado por el trajín vivido los días previos en Estocolmo, Suecia, el escritor no evadió hablar de política y criticó duramente a la candidata Keiko Fujimori.
“Si la hija del dictador que está condenado a la cárcel por criminal y por ladrón tiene la posibilidad de ser presidenta del Perú, voy a ser uno de los peruanos que saldrán a tratar de impedirlo por todos los medios legales posibles. Sería una verdadera catástrofe para el país”, señaló.
Previamente, aseguró que intervendría en la segunda vuelta del próximo proceso electoral general siempre que hubiera una amenaza contra el sistema democrático.
“El Perú vive una democracia perfectible y me importa que el modelo económico se mantenga; afortunadamente la mayoría de candidatos (presidenciales) lo garantiza”, precisó.
Llamado a clase política
Vargas Llosa llegó ayer al Grupo Aéreo 8 a las 7:40 de la noche junto a su esposa Patricia, sus familiares directos y una comitiva oficial encabezada por el ministro de Cultura, Juan Ossio Pastor.
Ojeroso y despeinado, demostró conservar las mismas ideas políticas que lo animaron a ser candidato presidencial en 1990.
Fue inevitable que el autor de ‘La Ciudad y los Perros’ hablara de política y no se lamentó de no haber participado activamente en ella. “Si me hubiese dedicado a la política, no hubiese escrito lo que escribí”, se sinceró.
A continuación aclaró que no volverá a este campo.
“No estaré en la política profesional nunca más, fue una experiencia intensa de tres años, muy instructiva y no grata y creo que carezco de condiciones para ser un político exitoso”, confesó al referirse a su fallida postulación a la presidencia.
A continuación hizo un llamado a la clase política, valorando los logros alcanzados en materia económica y continuidad en el modelo democrático:
“El país está progresando en los últimos diez años no solo por el crecimiento económico sino porque aparece como una democracia que va a la modernidad. Falta mucho por hacer y es importante que quienes hacen política en este contexto muevan el país hacia adelante y no lo hagan retroceder”.
Defensa de las libertades
Como siempre lo hizo, el primer peruano en ganar el Nobel defendió las libertades fundamentales.
Se refirió exactamente al reciente fallo del Tribunal Constitucional que prohibía la difusión de audios del chuponeo, y señaló que “si significara una amenaza contra la libertad de prensa, seré el primero en condenarla. Tengo trayectoria en defensa de la libertad de prensa y de todas las libertades”,
Sin embargo, sostuvo que en la última década en el Perú estas libertades no han tenido cortapisas.
Aseguró que no regresará a la presidencia de la comisión que diseña el Lugar de la Memoria, a la cual renunció tras el cuestionado decreto legislativo que buscaba impunidad para militares violadores de derechos humanos.
“Fue una renuncia irrevocable, pero me alegro de que ese decreto que era una gravísima equivocación porque hubiera sacado de la cárcel a condenados por violar derechos humanos, haya sido revocado. Fue una rectificación sensata y el Lugar de la Memoria está en marcha y hay conciencia amplia de que será un monumento para todas las víctimas de la violencia y de ninguna manera tendrá sesgo político”.
Vargas Llosa, quien recibirá los máximos honores del gobierno y del Congreso, señaló que el gobierno de Alan García fue “una sorpresa” y en el campo económico continuó las políticas que él defendió en los noventa.
Aseguró que no votaría por Ollanta Humala, pues en el poder hubiera significado una catástrofe por seguir el modelo del dictador venezolano Hugo Chávez.
“En el 2006 tenía el apoyo de Chávez, pero creo que ha moderado su discurso y sería irresponsable pronunciarme hoy en su contra”, dijo distanciando al candidato nacionalista de Keiko Fujimori.
Premio a la creatividad
Sobre el Premio Nobel dijo que amplía la tribuna del escritor, pero que significa un poder pasajero.
“Estas últimas semanas han sido muy intensas, y no me puedo quejar, estoy profundamente agradecido a todas las personas que celebraron el premio; no hay un reconocimiento a la obra de un escritor sino a la lengua en la que escribe y al país del que procede”, señaló en la conferencia de prensa.
Dijo que le alegraba saber que los peruanos hayan compartido la magnitud del premio, que “reconoce a la literatura peruana, su tradición y creatividad de los peruanos”.
Reiteró su gratitud a su esposa Patricia, quien en todo momento lo acompañó junto a sus nietas. Valoró su compañía de 45 años y su apoyo en la vida diaria y “en este momento tan importante de mi vida”.
Con elegancia, el escritor también se refirió a personajes con los que tuvo públicos enfrentamientos en el pasado, como Hernando de Soto.
Sostuvo que con seguridad seguirá teniendo polémicas, pero basadas en la discusión de ideas.
Finalmente, rindió homenaje al escritor José María Arguedas, cuyo centenario se celebrará el próximo año y graficó el poder que le dio el Nobel.
“El Nobel amplía las tribunas del escritor, es intenso pero pasajero. El Nobel me dio muchos amigos nuevos, gente maravillosa que se manifestó con cariño y quizá también gané algunos enemigos”.
El éxito y la soledad
El escritor será el centro de múltiples homenajes en Palacio de Gobierno y el Congreso. El presidente Alan García le impondrá la Medalla de la Orden de las Artes y las Letras y el Parlamento la máxima distinción.
Estos homenajes se prolongarán toda la semana. Sin embargo, el escritor tiene claro que el premio no variará su oficio esencial.
Antes de retirarse a su casa en Barranco anoche, anunció su próxima novela ambientada en el norte del Perú y dejó unas frases memorables sobre la gloria del Nobel:
“La publicidad en torno al Nobel no es la gloria. El verdadero éxito del escritor se vive en la soledad, frente al papel y el escritorio... Es el tipo de satisfacción que más añora y sueña un escritor, lo que venga fuera es bienvenido y si no viene no es grave”.
Claves
HOMENAJES. Mañana al mediodía se iniciarán los homenajes al escritor con una visita a la Casa de la Literatura, donde se inaugurará el congreso internacional “Las cartografías del poder en la obra de MVLL”.
En Perú. El escritor pasará el verano en el Perú. Esta semana inaugurará una exposición sobre su vida, bajo el título “La libertad y la vida” y participará en un conversatorio sobre su última novela, ‘El sueño del Celta’.
Feliz con noviazgo de su hijo Gonzalo
La prensa española ha puesto énfasis en el noviazgo de Gonzalo Vargas Llosa con la mexicana Genoveva Casanova, de quien afirman ha integrado perfectamente en la familia del escritor.
Genoveva ya ha mostrado estar totalmente integrada con su familia, y el propio Mario Vargas Llosa ha expresado su alegría por su presencia en la vida de su hijo, y ha dejado claro que ambos se llevan bien. “Es una chica muy simpática. La familia la ha recibido con mucho cariño y simpatía”, ha declarado el escritor.
Aunque ha confirmado que la joven “se hace querer rápidamente” y estos días en Estocolmo han transcurrido con gran armonía, lo cierto es que no pasarán las navidades juntos. “Ella las va a pasar en México con su familia”, dijo Vargas Llosa.
Por su parte Gonzalo Vargas Llosa dijo: “Estoy muy contento, toda la familia feliz. Han sido unos días preciosos”.
El Comercio
ESPECIAL. MARIO VARGAS LLOSA EN LIMA
La reflexión como forma de vida
El premio Nobel de Literatura 2010 llegó a Lima junto a su familia, y brindó una conferencia de prensa en la que habló de todo, desde política nacional hasta de cómo el premio ha cambiado su vida
Por: Rodrigo Bedoya Forno
Martes 14 de Diciembre del 2010
El sobresalto era general. A cada momento en que se corría el rumor de que Mario Vargas Llosa estaba por llegar al Grupo Aéreo Número 8, los periodistas se paraban y trataban de divisar si era verdad que el escritor se aproximaba al recinto que se había acondicionado para la conferencia de prensa. Tres veces simplemente se trató de una falsa alarma. Hasta que ocurrió.
Vargas Llosa, nuestro flamante premio Nobel de Literatura, llegó acompañado de su familia y del ministro de Cultura, Juan Ossio, que se sentó a su lado mientras respondía las preguntas de los hombres de prensa.
Las reflexiones del escritor sobre su reciente premio fueron las de un hombre que es consciente de que el poder del Nobel no dura para siempre. “El premio es algo muy intenso, pero también muy pasajero –afirmó–. A partir del 10 de diciembre, cuando me lo entregaron, la enorme curiosidad mediática comenzó a amainar y seguirá de esta manera hasta el próximo octubre, en que aparece el nuevo escritor premiado. Lo que me ha dado el Nobel son muchos amigos: mucha gente se ha acercado a mí con mucho cariño, y yo lo agradezco. Me han ayudado a mejorar mi idea del ser humano”, señaló, entre risas.
EN CONTRA DE KEIKO
Hablar de Mario Vargas Llosa es hablar de un hombre con una mirada clara y convencida de nuestra realidad política, a pesar de no vivir todo el año en nuestro país. Como bien señaló, probablemente si se hubiera dedicado a la política, no estaríamos festejando su Nobel. Además, afirmó tajantemente que no piensa volver a hacer política profesional, como cuando postuló a la Presidencia de la República en 1990. “Fue una experiencia intensa, no siempre grata pero muy instructiva; y una de esas enseñanzas fue que no soy político”, señaló.
El escritor reflexionó sobre la importancia de participar de alguna manera en la vida política. “Nadie debería darle la espalda a la política, porque después no tendríamos derecho a quejarnos”, dijo, para después señalar que él hace periodismo justamente para no desligarse de ese ambiente.
Vargas Llosa se mostró optimista sobre el futuro de nuestro país. “El Perú ha progresado –afirmó– no solo por el crecimiento económico, sino porque se nos ve como una democracia. Y nunca se ve mejor esa libertad que cuando hay debate, el cual debe ser estimulado. Lo que hay que evitar son los insultos, algo que forma parte de nuestra tradición, y que es un obstáculo terrible para nuestro progreso”.
Lo importante es no retroceder. Y para el escritor ese retroceso es Keiko Fujimori, cuya participación en una segunda vuelta electoral lo haría intervenir de una forma más activa en la política nacional. “Si la hija del dictador preso por corrupto tiene la posibilidad de ser presidenta, voy a tratar de evitarlo por todos los medios legales posibles”, anunció.
Los planes del escritor, por el momento, son pasar el verano en Lima, como todos los años. Aquí trabajará “La civilización del espectáculo”, un ensayo sobre la cultura hoy en día. Vargas Llosa ya está preparando una nueva novela, ambientada en el norte del Perú, y que también espera avanzar en Lima. La euforia del Nobel acabó. Don Mario vuelve a su pasión: la literatura. No pueden ser mejores noticias.
Diario 16
Política | Diciembre 14, 2010
"Keiko sería una verdadera catástrofe para el país"
Una lucecita en el firmamento chalaco alertó a las autoridades que esperaban el vuelo de Iberia que traía a nuestro país a Mario Vargas Llosa. La fosforescencia celestial transmutó en una nave que empezó a aterrizar en la rampa del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez.
El primero en recibirlo fue el Ministro de Cultura Juan Ossio. Con él llegó hasta el Grupo Aéreo Nº 8 donde la prensa nacional e internacional lo esperaba. Los flashes, el movimiento y el barullo confirmaron que el autor de Conversación en La Catedral, el creador de historias literalmente placenteras, el mismo de La casa verde, La ciudad y los perros, y Los cachorro, armado con un impecable traje gris y corbata granate, hacía su ingreso a dicho recinto en compañía de su adorada Patricia, la del carácter indomable y naricita respingada. Además de familiares y amigos.
Hace algunas semanas, el escritor había anunciado que si en las próximas elecciones se corría un riesgo de retroceso para el país, él participaría en la segunda vuelta electoral.
Anoche, ese riesgo fue mencionado con nombre y apellido: Keiko Fujimori. “Si la hija del dictador, que está condenado a la cárcel por criminal y por ladrón, tiene la posibilidad de ser presidenta del Perú, voy a ser una de las personas que va a salir a tratar de impedirlo por todos los medios legales posibles. Creo que eso sería una verdadera catástrofe para nuestro país”. Cabe indicar que hace unos días Keiko dijo, en una entrevista, que “le deseaba lo mejor”, y añadió que se había emocionado “cuando él habló de su esposa”. Ese “él” era Mario Vargas Llosa, el otro candidato del Fredemo, al que su padre casi le quita la nacionalidad peruana.
HUMALA, EL MODERADO
Para algunos sectores Ollanta Humala se encontraría en la esfera de las posibilidades de retroceso para el país, por eso la prensa le preguntó si el líder del nacionalismo también representaría un peligro. Sobre este candidato el escritor fue enfático. Señaló que si bien no votaría por él, Ollanta no se encuentra, actualmente, en el nivel de la hija de Alberto Fujimori. Incluso refirió que el líder de la Olla, a diferencia de la campaña anterior, había moderado su discurso. “Yo no votaría por el señor Humala porque sus ideas no son las mías. Pero no puedo decir que represente en estos momentos lo que representa la señora Keiko Fujimori.
La señora Fujimori es la hija de un dictador al que hemos visto actuar desde el poder, por eso está en la cárcel”.
“A mí me pareció en la campaña anterior una persona que representaba las ideas –y creo que contaba con un apoyo más resuelto- del comandante Chávez; era algo que, en el poder, hubiera significado una catástrofe. Entiendo que en estos momentos ha moderado considerablemente su discurso, y ojalá sea así; pero no quiero pronunciarme sobre y contra del señor Humala”, acotó. Las primeras palabras de Mario Vargas Llosa fueron de agradecimiento y estuvieron dedicadas a los peruanos, y demostró enorme alegría por estar de vuelta en el Perú, el país de sus entrañas. “Estoy muy contento de estar de vuelta.
Agradecido con todas las personas que han celebrado conmigo este premio en el que hay un reconocimiento, no solo a la obra de un escritor, sino también a la lengua en la que escribe y, desde luego, al país del que procede. Me alegra muchísimo que en el Perú los compatriotas lo hayan visto así, y hayan sentido que este es un premio suyo”. En ese momento, todos aquellos que miraban la conferencia de prensa, a excepción seguramente de Keiko y Carlos Raffo, debieron haber mostrado su alegría por estas generosas palabras de Vargas Llosa y por este gran logro otorgado a la disciplina y al perseverante talento del autor de Travesuras de la niña mala. Incluso, la congresista que dijo haber leído la inconseguible y aún inédita versión de ‘Ña Catita’ de Vargas Llosa, debió haberse mostrado más orgullosa que nunca. El escritor arequipeño indicó que en los últimos años se presentaron algunos intentos para cortar la libertad de prensa, pero resaltó que las protestas han sido enormes e impidieron que ello se consume. Dijo que carece de las actividades indispensables para ser un político exitoso y anunció que no volverá a participar profesionalmente en política porque su vocación ha sido, es y seguirá siendo, la de un escritor. Al final, y luego de la pugna por la mejor foto, la mejor imagen, el primer o mejor despacho de los medios, Mario partió del lugar. De frente a descansar. Mañana tendrá un día agitado: Al mediodía visitará La Casa de la Literatura, inaugurará el Congreso internacional ‘Las cartografías del poder en la obra de Mario Vargas Llosa’, y participará en un conversatorio en torno a ‘El sueño del Celta’. También inaugurará, en esa misma sede, la exposición ‘La libertad y la vida’. Y a las 8:00 de la noche recibirá la Orden de las Artes y las Letras, en Palacio de Gobierno. Todo ello en un solo día. Y Mario Vargas Llosa, el candidato que perdió las elecciones presidenciales en 1990, pero que ganó, veinte años después, el Premio Nobel de Literatura, acudirá, con una sonrisa afable, a todas y cada una de estas actividades programadas en su honor. Y todo el Perú seguirá las incidencias de estas celebraciones. Unos desde sus casas y otros, tal vez, desde una celda.
Roberto Ramirez
rramirez@diario16.com.pe
La Primera
Con el Nobel bajo el brazo
“No soy un político profesional”, dijo a su arribo Vargas Llosa, algo desligado del día a día de la política peruana. Sin embargo, reiteró su rechazo a la candidatura de la hija del ex dictador.
El Nobel de Literatura 2010 Mario Vargas Llosa llegó anoche a Lima para recibir una serie de homenajes y en el primer encuentro con la prensa del país, en la Base Aérea Nº 8, confesó que está desligado del día a día de la política peruana; pero dejó en claro su rechazó a la candidatura de Keiko Fujimori y fue menos duro con el líder nacionalista Ollanta Humala. Reiteró que sólo intervendrá de manera activa en la segunda vuelta de las elecciones si la democracia se viera amenazada por el retorno de representantes de la dictadura.
Ante una pregunta de la prensa sobre si Ollanta Humala significaba un riesgo para la democracia como Keiko Fujimori, Vargas Llosa deslindó con esta comparación: “Yo no votaría por el señor Humala porque sus ideas no son las mías, pero no puedo decir que el señor Humala representa exactamente en estos momentos lo que la señora Keiko Fujimori. La señora Keiko Fujimori es hija de un dictador al que hemos visto actuar en el poder. Por eso está en la cárcel”.
“El señor Humala a mí me pareció, en la campaña anterior, una persona que representaba las ideas y creo contaba con un apoyo muy resuelto del comandante Chávez, algo que desde luego en el poder hubiera significado una catástrofe para el Perú. En estos momentos, entiendo que ha moderado considerablemente su discurso, y ojalá sea así, pero no quiero pronunciarme sobre y/o contra el señor Humala. Sería irresponsable hacerlo, porque no sigo el día a día de la política peruana. Sólo intervendré en la segunda parte de la elección si la democracia peruana se viera amenazada por el retorno de representantes de la dictadura que ha traído tantos estragos”, agregó.
El poder del Nobel
Con respecto al poder mediático de su imagen y el poder político que ello le brinda, aseguró que es algo momentáneo: “El Nobel amplía un poco las tribunas a través de las cuales uno puede manifestarse. Es algo muy intenso, pero muy pasajero. Desde el 10 de diciembre, en que me entregaron el premio, esa enorme curiosidad mediática comienza a amainarse” y poco a poco iría desapareciendo hasta el próximo año en que haya otro Nobel de Literatura.
Sobre su participación en política, volvió a sostener que no lo hará nunca más como candidato: “Yo no voy a participar en política profesional nunca más. No soy un político. Carezco de la aptitudes indispensables para ello”.
Progreso desde fuera
“El Perú está progresando. Eso se ve más desde afuera que desde adentro”, dijo Vargas Llosa, Manteniendo así su postura que, a la distancia, se ve el progreso del país, no así cuando uno vive inmerso en la cotidianidad de la política peruana: “Me da mucho gusto ver la buena imagen que tiene el Perú y no solamente desde el punto de vista económico, sino porque aparece como una democracia. Desde luego que falta mucho por hacer, pero lo que es importante es que quienes hacen política en este país muevan el país hacia adelante, no lo paren y, sobre todo, no lo hagan retroceder”.
Sostuvo, asimismo, que no volverá a presidir la comisión del Lugar de la memoria, y resalta que haya una conciencia de que la construcción se realiza sin sesgo partidista ni político. Incluso hizo hincapié en que el Perú vive “afortunadamente, una democracia que no es perfecta, pero que es perfectible”, pese al decreto de amnistía que afortunadamente fue revocado por el Congreso, una “rectificación sensata y oportuna”, que se realizó luego de su renuncia a dicha comisión.
Sobre la mención de su esposa Patricia en su discurso por la obtención del premio Nobel de Literatura, dijo: “He rendido un homenaje a una persona con la que estoy casado 45 años, que me ha prestado una ayuda invalorable. Me pareció que en este momento tan importante de mi vida es un acto de justicia decirle públicamente lo que le debo”.
Arguedas 2011
Sobre José María Arguedas, el escritor de “La utopía arcaica” dijo: “Es un autor que he leído mucho y he enseñado en cursos universitarios. Creo que es uno de los grandes escritores que ha tenido el Perú. Creo que el centenario de su nacimiento es una buena oportunidad para rendirle homenaje a uno de los grandes escritores que ha dado el Perú”.
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Celebrando 10 anos "On Line"..2009
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